I “fochi” de San Giovanni

I “fochi” de San Giovanni

Florencia en verano es aún más extraordinaria, pero hay una noche especial que la ilumina y la hacer resplandecer en toda su majestuosidad! Se trata del 24 de Junio, día en el cual se celebra a San Giovanni (San Juan), el patrón de la ciudad. Un día entero de festejos, entre desfiles históricos y juegos tradicionales que terminan con los "fochi" (fuegos), un espectáculo pirotécnico increíble desplegado desde el Piazzale Michelangelo.

La figura de San Juan Bautista en el medioevo encarnaba "la rectitud moral y la corrección politica". El Bautista fue un santo de gran valor simbólico para la ciudad, hasta el punto que su imagen estaba estampada en el "fiorino", la moneda oficial florentina.

El nacimiento de San Juan Bautista era originalmente celebrado por los señores y los nobles florentinos, que donaban velas y cereales para la ocasión. Con el paso de los siglos, la fiesta se extendió hasta involucrar a toda la ciudad.

Actualmente las celebraciones comienzan con un desfile guiado por el "Gonfalone", y que va desde Palazzo Vecchio hasta el Battistero. Desde aquí las autoridades de la ciudad y el Arzobispo llegan al Duomo para la celebración de una misa solemne.

En la tarde se juega la esperadísima final del Calcio Storico (Fútbol Histórico), que es el fútbol jugado con trajes de época, y que representa una de las tradiciones mas originales y amadas del verano florentino. Verdaderos grupos de fanáticos se reúnen, de hecho, todos los años en Piazza Santa Croce y, bajo la mirada severa de la estatua de Dante, animan a sus equipos en voz alta. Los "Bianchi di Santo Spirito" (Blancos), los "Rossi di Santa Maria Novella" (Rojos), los "Verdi di San Giovanni" (Verdes) y los "Azzurri di Santa Croce" (azules) se retan en dos partidos durante la tarde del 24 de Junio, después de un desfile en trajes de época que anticipa la final y enciende a los fanáticos.

El día concluye con los espectaculares fuegos artificiales, "I Fochi" como se dice a la florentina! La explosión de un disparo de cañón a las 10 de la noche en punto, marca el inicio de un espectáculo pirotécnico sin igual: lanzados desde el Piazzale Michelangelo, los fuegos artificiales pueden ser vistos desde todos los ángulos de la ciudad, e iluminan las riberas del Arno de chispeantes policromías, haciéndolos aún más mágicos. Desde el maravilloso panorama de las colinas de Fiesole hasta las riberas del Arno repletas de gente no hay duda de que en cualquier punto de la ciudad que se encuentren, será una noche inolvidable!