Al igual que en muchos otros países del mundo, en Italia, el 8 de Marzo se celebra el Día de la Mujer, y quien decidió estudiar italiano en Florencia , se dará cuenta de ello. Con la primavera a la vuelta de la esquina, la ciudad está literalmente invadida por el aroma de la mimosa. A pesar que el Women’s Day sea una fiesta internacional, la tradición de regalar una mimosa es totalmente italiana y se remonta a la posguerra. Descubramos como nació!
La leyenda cuenta que éste evento ha sido creado para conmemorar a las trabajadoras víctimas de un incendio en una fábrica de Nueva York. De hecho, el Día Internacional de la Mujer, simplemente conocido en Italia como, Día de la Mujer, nació en los Estados Unidos, pero se instauró a principios del siglo XX por la lucha sindical y el debate sobre el derecho al voto para las mujeres.
Los derechos de las mujeres están históricamente ligados al socialismo y, en general, a la condición de los trabajadores. Durante la segunda Internacional socialista de 1907, el sufragio de las mujeres fué un tema muy debatido por personalidades como Rosa Luxemburgo y Clara Zetkin, por ejemplo, quienes pusieron en primer plano la cuestión del género. Es por iniciativa del Partido Socialista – americano ésta vez - que dos años más tarde, en los EE.UU, se celebró el primer Día Internacional de la Mujer. La iniciativa, a favor de extender el derecho al voto a las mujeres, se repitió al año siguiente, en 1910, año en el que se celebró en Copenhague el octavo Congreso de la Internacional Socialista, donde se propone la creación de un partido oficial. El 8 de Marzo de 1917, mujeres rusas, en San Petersburgo, manifestaron para exigir el fin de la guerra y, desde ese momento, esa fecha fué acogida convencionalmente para celebrar el aniversario.
Precisamente por el contexto político y cultural desde donde se originó, durante el régimen fascista el Día de la Mujer nunca se celebró. El 8 de Marzo se celebra oficialmente por primera vez en Italia en 1946, poco después del final de la guerra.
Como flor símbolo se propuso la violeta, históricamente vinculada a la izquierda europea. Fueron tres mujeres italianas las que propusieron la mimosa - Rita Montagnana, Teresa Noce y Teresa Mattei, ésta última heroina de la Resistencia italiana, quien estudió aquí en Florencia y quien a los 17 años fué expulsada de todas las escuelas del Reino por no haber querido adherirse a los preceptos racistas. Las precarias condiciones económicas de la posguerra, de hecho, no permitían comprar violetas, muy caras y difíciles de encontrar. La mimosa, además de florecer justamente en éste periodo y ser muy económica, era la flor que los partidarios regalaban en los relevos y la cual se convirtió en el símbolo por excelencia de la hermandad.
